Saldrás de Santander a primera hora de la mañana hacia el pueblo de Potes. En el camino tendrás que cruzar el impresionante desfiladero de la Hermida (un conjunto de estrechos desfiladeros a lo largo del río Deva). Una vez en Potes, tendrá la oportunidad de hacer una pequeña peregrinación a pie al Monasterio de Santo Toribio (a 3 km del pueblo, unos 45 minutos de caminata).
El Monasterio de Santo Toribio es un lugar sagrado para la cristiandad ya que guarda un trozo de la cruz en la que murió Jesucristo. También es famoso por su Año Jubilar. Cuando se abre su puerta del perdón, comienza un nuevo Año Jubilar. Está cerrado ahora y será reabierto en 2023.
La importancia de este Monasterio ya era conocida en la Edad Media cuando la peregrinación al Monasterio para ver el Lignum Crucis era visita obligada para los Peregrinos que iban a Santiago de Compostela. Además, este lugar era en sí mismo un lugar de peregrinaje, con identidad propia debido a los poderes curativos y milagrosos atribuidos a los restos del Santo de Astorga ya la propia Reliquia.
Harás el recorrido más corto posible, de hecho es el último tramo del Camino Lebaniego antes de llegar al Monasterio. A las 12.00 h asistiréis a la misa del peregrino. Después de la misa, regresarás a Potes para almorzar. Disfrutará de un plato local llamado “Cocido Lebaniego” (un guiso de garbanzos y carne). Sin embargo, si prefiere otro menú, háganoslo saber en el momento de la reserva.
Después del almuerzo, tendrá tiempo libre para visitar Potes y hacer algunas compras. Durante la tarde, visitará San Sebastián de Garabandal, un pequeño pueblo en las montañas donde hubo apariciones de la Virgen María desde 1961 hasta 1965. Aquí tendrá la oportunidad de caminar hasta el "Santuario de Los Pinos", el principal Lugar donde se apareció la Virgen María.