Haga un viaje a la capital del mundo católico y descubra la historia, el misterio y las obras maestras de esta pequeña y poderosa ciudad-estado ubicada en el centro de Roma.
Al ser el lugar de enterramiento de San Pedro de Roma, el Vaticano siempre ha sido considerado una ciudad santa con su asombrosa galería de estatuas, mapas, tapices y las habitaciones de Rafael. Durante su visita a los Museos Vaticanos, tendrá la oportunidad de conocer a los grandes artistas que ayudaron a embellecer uno de los estados soberanos más fascinantes del mundo. Prepárense para el efecto del síndrome de Stendhal al entrar en la Capilla Sixtina y levantar la cabeza hacia el techo más famoso y admirado del mundo. Sumérgete en el “Juicio Final”, el fresco aparentemente interminable magníficamente adornado por las potentes y realistas figuras de Adán, Dios y los santos de Miguel Ángel, ¡e intenta detectar el autorretrato del artista en el torso de San Pedro!
Un viaje así sólo puede realizarse después de otra visita final especial: el interior de la basílica de San Pedro: admire los increíbles mosaicos, la Piedad de Miguel Ángel y el Baldaquino de Bernini en todo su esplendor.