Vive una experiencia mágica desde el puerto situado bajo el puente de Stefanik, uno de los cruces fluviales en activo más antiguos del centro de Praga. Subirás a bordo del barco y disfrutarás de una bebida de bienvenida.
Navegarás tranquilamente sobre las aguas del río Moldava en dirección al puente de Carlos. Surcando la ciudad por la noche, podrás admirar monumentos históricos iluminados, como el castillo de Praga, la fortaleza Vyšehrad, el teatro nacional y la sala de conciertos neorrenacentista del Rudolfinum, donde actúa la orquesta filarmónica de la República Checa.
Como broche de oro de la experiencia, también podrás darte un festín con un bufé libre mientras navegas por las aguas de esta pintoresca ciudad.