Graciosa por nombre y aspecto, La Graciosa es la "otra" isla canaria, una que pocos visitan. Situada a sólo un kilómetro al norte de Lanzarote, es como otro mundo: no hay coches, por lo que no necesita carreteras asfaltadas. Y este crucero de lujo en catamarán es la oportunidad ideal para conocer esta rústica isla volcánica.
Embarque en el ferry y cruce el estrecho de El Río hasta el tranquilo pueblo de Caleta del Sebo, el mayor de los dos asentamientos de la isla. Explórelo a su ritmo o con su guía. A continuación, suba a bordo del catamarán -donde le obsequiarán con un mojito- y deslícese por la escarpada costa de la isla. Se acercará a Playa Francesa, a la sombra del volcán Amarilla, donde podrá practicar snorkel, kayak y disfrutar de las vistas.
Mientras tanto, de vuelta a bordo, le servirán un almuerzo a base de paella, regado con bebidas frías. Después, podrá disfrutar de las vistas desde la cubierta antes de coger el ferry de vuelta a Lanzarote.