Vale la pena comenzar temprano para pasar el día en esta fascinante metrópolis en el estrecho del Bósforo, la única ciudad del mundo ubicada en dos continentes. Tomarás un vuelo temprano por la mañana a la ciudad más grande de Turquía y pasarás un día explorando su rico patrimonio. Entre los lugares de interés que tendrás la oportunidad de visitar se encuentran la Mezquita Azul, el Palacio de Topkapi, el Bazar Egipcio y el Puente de Gálata.
A tu llegada a Estambul, disfrutarás de una visita guiada por el casco antiguo antes de dirigirte a la Mezquita Azul, llamada así por los azulejos azules que adornan su amplia sala de oración. El siguiente paso es el Hipódromo, lugar de antiguas carreras de carros, donde verás la Fuente Alemana, la Columna de la Serpiente y más. Luego tendrás tiempo libre para almorzar.
Pase la tarde haciendo turismo como desee: el Palacio de Topkapi, Santa Sofía y la Cisterna Basílica están todos en la misma zona, así que elija. El Palacio de Topkapi es uno de los favoritos, una "ciudad prohibida" donde vivían los sultanes otomanos, repleta de joyas y una decoración lujosa. Después de tiempo libre para curiosear por el Bazar Egipcio, existe la opción de realizar un crucero por el Bósforo y cenar junto al Puente de Gálata antes de regresar al aeropuerto.