Leipzig, que surgió en el cruce de dos rutas comerciales, pronto se impuso a ciudades vecinas como Meresburg y Halle gracias a sus privilegios feriales. Los ciudadanos adinerados transformaron esta ciudad a orillas del río Elster en un centro editorial y musical.
Durante la revolución industrial, Leipzig se ganó el reconocimiento mundial como centro comercial. A pesar de haber soportado dos guerras mundiales y tiempos difíciles bajo la República Democrática Alemana, Leipzig ha logrado recuperar parte de su antigua gloria. En la ciudad se han establecido prósperas empresas, que ahora cuentan con una infraestructura bien desarrollada. Las antiguas minas a cielo abierto se han convertido en zonas de ocio, mientras que la escena cultural está experimentando un renacimiento. La sociedad civil sigue siendo tan activa como lo fue durante la revolución pacífica, lo que contribuye a que Leipzig sea una de las ciudades de más rápido crecimiento de Alemania.
Pasee tranquilamente por el compacto centro de la ciudad, donde encontrará impresionantes edificios feriales y cafeterías, la universidad, la iglesia de San Nicolás y diversas instituciones culturales y artísticas. Aventúrese un poco más lejos para presenciar la transformación de antiguas minas de lignito a cielo abierto en un pintoresco paisaje lacustre.